Arcadia Fugaz

Oriente, vislumbrar su futuro, ante la violencia estadunidense y el tener conciencia critica

El pueblo de Israel se parece cada día más a los Estados Unidos de Norteamérica. Ya los niveles de desigualdad, y pobreza son altos, lo que incide sobre los salarios estancados, con una población que erosiona en un sistema social de antaño. Israel, (una facción del pueblo judío), ha estado favorecida por USA, que, oculta su poderío bajo el sello de la industria militar. Francia ha estado cerca de ellos, busca soluciones sencillas en estos territorios mesopotámicos para evitar destinos inciertos de grupos árabes que, desean avanzar hacia el centro del África, donde se encuentran las minas de oro y, el gobierno burgués de Macron, desea alinearse a Venezuela con su neoliberalismo para tener parte en las concesiones de la industria de hidrocarburos y minería.

El tema de Jerusalén sigue en discusión, a pesar de la decisión de Donald Trump por todos conocidas. Algunas veces los humanistas occidentales prefieren no ver lo acontecido o acontece en Tierra Santa y a los territorios cercanos. Hay una sabiduría silenciosa, encubre a Jerusalén.

Las industrias israelíes, quienes ya exigían un Estado palestino, antes de los acuerdos de Oslo. Es para integrar los territorios y, que cada Estado ejerza su propia economía. Me explico, Estados en Israel y, en Gaza.

Recientemente, Irving Kristol explicó que, "el argumento de la legislación internacional adolece a toda credibilidad". En Efecto, "Normalmente una gran potencia no debería intervenir en los asuntos internos de una nación más pequeña". La lógica de Kristol se extiende, "Washington quiere ir más allá, lejos en el caso de Rusia. Ya la Unión Soviética soportó y ejerció el derecho de agresión en tiempos de Gorbachov".

Los escenarios, se encuentran preparados para la intolerancia. Es bueno, tener memoria, los escritores escribimos esas narrativas de los pueblos y, al comparar cada uno de ellos, existe una similitud. Son días difíciles, ya hay dichos sobre Venezuela, Chile, Nicaragua, Colombia, Rusia, Cuba y Argentina.

No creemos los venezolanos en una revolución fantástica, es el momento de la reconstrucción nacional, dejando atrás la anarquía que apestan las calles. Las aguas de la Cuenca del Caribe nos bañan, como el Mediterráneo deja que sus olas acaricien a Gaza con sus niños, elevando sus volantinas, una alegría infantil, de convivencia y amor, expuestos a las raíces de amargura de Israel.

Es una larga espera escatológica. Hay un fondo de oración o plegaria. Tenemos que entender la traducción de La Biblia por Casiodoro De Reina y Valera. Es la identidad política y lingüística de los pueblos, Son lenguas que se cruzan en el desierto, es recobrar la lógica fragmentada, es solucionar lo mal hecho y, pedir perdón a los indolentes que, tienen sus amarguras y, jamás han reconocido que Jesús soporto improperios de sus hermanos de etnia y raza.

Estados Unidos de Norteamérica se convirtió en violento. Solo, le importa su nivel financiero. Ante esta realidad, hay que ser flexible en los pensamientos., debemos ir a una conciencia crítica para crecer en un mundo económico. De lo financiero se desprende lo económico y político para ir a lo social.

Es necesario ver, la visión de un futuro. Es la realidad del Medio Oriente, allí hay un futuro distinto, todo se encuentra escrito y, la otra es nuestra verdad sobre una posverdad. Para entender esa historia hay que profundizar en la lectura de La Biblia y orar, todo será descubierto ante nuestros ojos., es despertar en conciencia espiritual en una nueva narrativa, más allá de un teléfono inteligente.

Para interpretar la historia, me vengo sumergiendo en la inteligencia artificial de la investigación espiritual y de la psicología- psiquiatría. Es decirle a la vieja alimentación, un adiós hasta llegar a los embutidos, es desintoxicarnos. Israel y el Este europeo- asiático es lo novedoso para interpretar lo que somos.

Jean Paul Sartre, decía que estamos enfermando de causas políticas, ante este acto, busquemos una vía intermedia entre el anquilosamiento del lenguaje y al descenso del sinsentido., entre la mala fe y el caos espiritual., entre una aceptación de modelos totalitarios y el cinismo político. Es una ecuación espiritual., es conectarnos con Jesús para entender lo que representa Israel al mundo y, en qué situación se refleja ante el espejo de la arqueología y de las pléyades. El lenguaje debe ser de uso real., nos permite tener conciencia humana. Es puntilloso explorar las causalidades del alma humana, porque la conciencia no conoce su propio carácter, porque pertenece a la genética de Jehová.

Rusia, no caerá, menos Israel y Venezuela pacta con países del Medio Oriente ignorando el poder que allí se respira. Allí se respira la destructividad. Ella es irracional y actúa por impulsos y siempre logran sus impulsos en un individuo de manera mental.

Transcribo, ocupémonos de lo real, de nuestra existencia, no perdamos nuestra conciencia espiritual y alejémonos de las discusiones políticas, de los extremos y caigamos en el placer sensual, no pervertido, es dejarnos llevar por las tendencias que destruyen al hombre. USA se extingue en su propio fuego y los países mesopotámicos tienen su propio fin, no quieren a nadie, son hijos de la desobediencia y quieren arroparnos y alejarnos de una verdad única, Son los mecanismos que busca afectar nuestros sentimientos.

Rusia, no ha logrado sistematizar los paradigmas que le permiten utilizar su pensamiento útil. En un futuro se le hará bajo la coordinación de Grecia y el Estado del Vaticano.



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Emiro Vera Suárez

Profesor en Ciencias Políticas. Orientador Escolar y Filósofo. Especialista en Semántica del Lenguaje jurídico. Escritor. Miembro activo de la Asociación de Escritores del Estado Carabobo. AESCA. Trabajó en los diarios Espectador, Tribuna Popular de Puerto Cabello, y La Calle como coordinador de cultura. ex columnista del Aragüeño

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