Siempre que nos referimos al Tigre de Papel, se nos viene a la mente la imagen de un Estados Unidos guerrerista, dominante, esclavista conquistador e imperialista, pienso que esto es ya una herencia que tiene su origen en el ADN de la sangre heredada del barco en que los colonos ingleses con aquel escabroso legado aportado por los puritanos hace ya unos cuatrocientos años. Mayflower que zarpando del puerto de Plymouth con su carga humana de religiosos, unos que escapaban de la persecución y otros que se embarcaron en busca de aventuras, más allá de Inglaterra en otras nuevas tierras, lejanas en el otro lado del mar para entonces colonia de los ingleses. De esta herencia nace la esclavitud, posteriormente la guerra civil, y un racismo sistémico que hasta hoy perdura. A pocos metros de la Casa Blanca se han escrito frases con pintura amarilla tales como Black Lives Matter o ·"La vida de los negros es importante", luego de las repetidas muertes de personas de esta raza por exceso de los cuerpos policiales. De este modo vemos cómo en medio de la lucha contra el brote de coronavirus, en un nuevo mundo desconcertante, también estamos atados a la herencia de Mefisto y sumergidos en los eventos de antaño. Hoy vemos como estos maléficos genes y herencia de los colonos del Mayflower persiste aún todavía. Los Estados Unidos esgrimen por doquier la divisa de la lucha contra el comunismo con el objeto de agredir a otros países. Hoy abre sus garras contra Rusia, China e Irán, ayer fue Irak, Vietnam, Hiroshima Nagasaki Libia Siria Etc. Los pueblos del Mundo están descontentos, y lo están también las autoridades de algunos países. La gran mayoría de la gente exige un cambio. El pueblo norteamericano también está descontento con el gobierno de su país. Cometer errores tiene su lado positivo, pues de ello se pueden extraer enseñanzas para el pueblo. En la actualidad, el imperialismo norteamericano exhibe una gran fuerza, pero en realidad no la tiene. Políticamente es muy débil, porque está divorciado de las grandes masas populares y no agrada a nadie; tampoco agrada al pueblo norteamericano. Aparentemente es muy poderoso, pero en realidad no tiene nada de temible: Es un tigre de papel. Mirado por fuera parece un tigre, pero está hecho de papel y no aguanta un golpe de viento y lluvia. Pienso que Estados Unidos no es más que un tigre de papel. Sólo podrá haber paz cuando haya sido eliminado el imperialismo. Llegará el día en que el tigre de papel será destrozado. Pero no desaparecerá por sí mismo; para ello hace falta el golpe del viento y la lluvia. Debemos tomar hoy día muy en serio las palabras y acciones de este Tigre de Papel. El posee garras y dientes. Para acabar con él hemos de hacerlo por partes. Si, por ejemplo, tiene diez dientes y en el primer golpe le arrancamos uno, le quedarán nueve; le arrancamos otro más y le quedarán ocho. Cuando le hayamos quitado todos los dientes, le quedarán todavía las garras. Siempre que procedamos paso a paso y de modo concienzudo, conseguiremos finalmente el éxito. Desde el punto de vista estratégico, se debe despreciar por completo al imperialismo norteamericano, mientras que en lo táctico hay que tomarlo muy en serio. En la lucha contra él, es necesario prestar atención a cada batalla y a cada caso. Actualmente, Estados Unidos es un país poderoso; pero, examinándose con una óptica amplia, en su conjunto y en perspectiva, se hallará que este tigre morirá sin remedio, porque es impopular, aplica una política que no complace a nadie, y oprime y explota a los pueblos . Sin embargo, Estados Unidos todavía cuenta con cierta fuerza, produce anualmente millones de toneladas de acero y atropella a la gente por todas partes. Se hace por eso necesario al proseguir la lucha contra él, empeñar grandes esfuerzos en ello y arrebatarle posición por posición. Esto requiere tiempo. Hoy ha llegado ese tiempo y USA y sus gobernantes hoy lo saben, ya el presidente Biden habla abiertamente ante los medios de un muy posible Armagedón nuclear próximo. Todo parece indicar que los países de América, Asia y áfrica tendrán que seguir peleando con Estados Unidos hasta el fin, hasta que el viento y la lluvia destruyan este tigre de papel. Si hacemos bien este trabajo, podremos liquidar de raíz la opresión imperialista. En este sentido todos somos camaradas. Finalmente nos preguntamos ¿Para qué se necesita el imperialismo? No lo necesita el pueblo, tampoco lo necesitan los demás pueblos del mundo. No hay necesidad de que exista el imperialismo. El tigre de papel hoy sabe que sus días de futuro están contados, que ya no puede sólo derribar con un zarpazo a sus enemigos eternos China y Rusia, como lo sabe tal y como lo hicieron otros imperios en la historia quiere, necesita propicia y anhela las guerras armadas, concebidas y diseñadas por sus Halcones de la Guerra, como es hoy el caso de los actuales disturbios en Irán y la guerra en Ucrania. Estados Unidos hoy desea y propicia que venga un armagedón nuclear, aún juega el poker de la guerra, apuesta a que Rusia y China temerán sus feroces rugidos y echarán a correr temerosos, en último caso prefiere sucumbir junto con sus enemigos de siempre, no importa que con ello se lleve al planeta tierra y todos los humanos por delante, con tal de no ser vencido y de presenciar su futura derrota, prefiere al Armagedón Nuclear, hace tantos siglos mencionado por San Juan en su conocido capítulo bíblico del Apocalipsis.El tigre de papel aún es fuerte y muy peligroso Pero conoce y sabe bien, que sus días como rey de su imperio y poderoso actor de las guerras están contados.
