Bajo Control Nº 84

Venezuela dijo adiós a la CAN

I.

Mejor anuncio no podía darnos el camarada Ricardo Menéndez, Ministro del Poder Popular para Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias: Venezuela se va de la CAN.

Ya era tiempo que nuestro gobierno revolucionario, se desacoplara de ese atrofiado y maligno aparato denominado la Comunidad Andina de Naciones (CAN), que no ha servido para erradicar la pobreza, ni la exclusión y ni la desigualdad, ya que siempre ha sido fiel ejecutor de las doctrinas capitalistas, con las cuales el imperialismo siempre se apropia de nuestras riquezas y saberes; desde la sustitución de importaciones, pasando por las falsas nacionalizaciones del hierro y el petróleo hasta llegar a los TLC de hoy día.

La CAN tiene muchas penas y ninguna gloria. En sus libros se registran records en crecimiento económico pero sin desarrollo humano, incrementos en el PIB pero sin disminución de la pobreza. En el mejor momento, ingresos per cápita de 4000 dólares pero los pueblos sufrían 120 % de inflación y se precipitaban al 89 % de pobreza extrema.

En fin, sus saldos de nada sirven a la población de América del Sur.

II.

Ahora tenemos el reto de refundar nuestro aparato productivo. Un reto de ser potencia complementadora, tal como lo establece el Plan Nacional Simón Bolívar.

El reto es que la  ALBA sea exitosa. Es decir, económicamente sustentable, socialmente justa y ecológicamente pertinente.

Entonces hay que conjugar varios elementos: (a) talento venezolano, materia prima, energía, maquinaria, tecnología, ciencia y técnica; (b) el poder político y económico de nuestro gobierno revolucionario; (c) las alianzas con pueblos hermanos y gobiernos amigos; (d) la organización revolucionaria de los saberes  bajo el estandarte de Misión Sucre y Misión Alma Mater (especialmente la UBT “Jesús Rivero” en cada fabrica); (e) la organización  de las Comunas; (f) la organización de los Consejos de Trabajadores y Trabajadoras bajo el enfoque del Control Obrero y (g) la doctrina revolucionaria recogida en las Leyes del Poder Popular.

Se plantea elevar la producción industrial para resolver problemas humanos; elevar el nivel de aprendizaje técnico; poner en funcionamiento fábricas y empresas, cuya construcción se interrumpió a mitad de camino y meterle todas las manos a la siembra.

III

Este momento histórico debe servir para reflexionar sobre las impolíticas medidas de importar todo (como en PDVAL) y relacionarlas con la conveniencia de convertir en hechos cumplidos, los objetivos fundamentales de la revolución: alimentar sanamente, vestir, dar techo digno, garantizar salud y facilitar educación liberadora al pueblo, lo cual se consigue solo con el trabajo productivo:

  • Nuestro hierro debe transformarse en tractores, arados, cosechadoras, silos y molinos para la agroindustria.
  • El aluminio en vehículos, cables y turbinas eólicas.
  • Los rellenos sanitarios en centros de producción de abono orgánico.
  • Cada cuartel, liceo, universidad o fábrica debe producir sus propios alimentos en los terrenos que administra.
  • Las comunas deben ser productoras de alimentos; desarrollar pequeñas industrias como hilanderías y telares, también administrar medianos talleres de producción o reparación.
  • Las cooperativas crear grandes frentes para el transporte, la hotelería, la construcción civil, confección de ropa  y mecánica automotriz-diesel.
  • La universidad tiene que convertirse en la fuente del ingenio popular, tiene que enseñar haciendo y marchar junto al pueblo rumbo al socialismo.
  • Los talleres de maquinas y herramientas de las empresas públicas, todos con muchas horas libres, deben formar una Red por la Soberanía Tecnológica para fabricar maquinas.
  • Cada infraestructura productiva, abandonada inexplicablemente por entes (matavotos) del gobierno revolucionario, debe ser rescatada y puesta en funcionamiento. Por ejemplo en municipios del estado Bolívar: Aldea Universitaria de El Caimito-Caroni, Planta de Soya en Guaimire-Heres, Planta de Queso en Upata-Piar, Planta de Casabe en Maripa-Sucre.

Decir adiós a la CAN, es parte de la Rectificación Antiderechista que la revolución necesita.

Cuenten conmigo para refundar el aparato productivo de Venezuela.

Unidos Venceremos.

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Alexis Adarfio Marín


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