Para nadie es un secreto que con la llegada de la Revolución Bolivariana en 1998 se detuvo la privatización del Instituto Venezolano del Seguro Social (IVSS). Así lo aseguro el lunes 19 de julio de 2010, desde Miraflores, en caracas en un acto con pensionados del IVSS y beneficiarios del decreto presidencial 7.401, nuestro comandante presidente Hugo Chávez Frías, cuando dijo: “Llegó a tiempo la Revolución Bolivariana. La primera gran decisión del gobierno revolucionario fue detener la privatización del Seguro Social. Y así fue como se salvó el Seguro Social, porque lo tenían preparado para privatizarlo”.
La política de impulso en el sector salud que ha llevado el gobierno revolucionario que lidera nuestro comandante presidente Hugo Chávez Frías, con la inversión en obras civiles, dotaciones de mobiliarios, equipos médicos, medicamentos e insumos es descomunal; pero de igual forma, continúan las deficiencias y limitaciones en la capacidad operativa quirúrgica y de hospitalización en el hospital del seguro social del estado Mérida. Es que la verdad verdadera, es que no existe la correlación entre la inversión y los resultados obtenidos, situación que debe ser exhaustivamente revisada, para establecer las responsabilidades a que hubiere lugar. Es imprescindible avocarse a evaluar la productividad y la capacidad de respuesta asistencial del sector público en el estado Mérida, para determinar si el estado Mérida esta siendo efectivo y eficaz en el rescate del sector salud; porque nadie duda sobre la magnifica intención de nuestro comandante presidente Hugo Chávez Frías, para mejorar el sector salud, sin embargo los efectos no son los esperados, pero no son los esperados, no por nuestro comandante presidente Hugo Chávez Frías, sino por una cuerdas de sinvergüenzas que todavía siguen enquistados en el proceso revolucionario; a pesar de haber sido beneficiado el hospital del seguro social del estado Mérida, con la dotación de equipos médicos de avanzada tecnología, no ha podido todavía arrancar como tiene que ser, la desidia, y la corrupción nos carcome. Esto se ve funcionando a media, cuando se trata de un amigote de los señores que administran el seguro social del estado Mérida; pero para el pueblo, ni nai ni nai.
Comento que he recibido cantidades de llamadas, y correos, denunciando esta aberración en contra del pueblo merideño; la ciudadana Mercedes Dávila, de 75 años de edad, llego al hospital del seguro social de Mérida, a las 5:25 de la mañana del día viernes 18 de marzo de2011, con quebrantos de salud, con mucho miedo, por la noticia, de lo que esta pasando en Mérida, con lo de la gripe influenza AH1N1, en donde existen 56 casos, razón por la cual, el Ministerio del Poder Popular para la Salud, ha distribuido más de 80 mil vacunas contra la gripe influenza AH1N1 para Mérida, para evitar la propagación de este virus; pero resulta que esta ciudadana a la hora que llego, y a la hora que fue atendida por los médicos del hospital del Seguro Social, a las 3:00 de la tarde. A la Sra. Mercedes, en el tiempo de espera, le bajo la fiebre, se le acelero la tos, se le soltó una diarrea, y nadie absolutamente nadie la atendía; la respuesta de los señores encargados de atenderla o pasarla para diagnosticarla, era: “Los médicos están en reunión” Así mismo le paso a la ciudadana Astrid Rojas, quien llego un poco más tarde 6:00 de la mañana, igualmente la atendieron casi a las 4:00 de la tarde, la ciudadana Astrid, llego con un cuadro de Bronquitis Aguda, independientemente, la enfermedad que padezcas, en el hospital del seguro social de Mérida, tienes que pedirles a todos los santos para que no pase nada o mejor dicho para que no se empeore su estado de salud, es por esto el llamado a todo aquel que le duela el hospital del seguro social del estado Mérida, y el pueblo merideño, en donde a diario se veja al pueblo venezolano, a que se haga una revisión de lo que se hace, y como se hace a diario en este hospital. Hasta cuando la desidia, y la corrupción en el hospital del seguro social del estado Mérida.
Patria Socialista o Muerte Venceremos.
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