• La presencia de barcos de guerra ingleses en maniobras con Guyana, es una advertencia para Venezuela, sobre los verdaderos intereses que están detrás de la controversia. Los imperios buscan el enfrentamiento, el caos, para luego aplicar las actividades de rapiña y saqueo de recursos, que históricamente han realizado. No hay que dormirse en los Laureles, hay de denunciarse estos actos de hostilidad a nivel interaccional.

• Todas las organizaciones políticas, independientes, ONGAs, que participaron en el Referéndum, deben con la misma fuerza y voluntad rechazar la presencia de barcos de guerra ingleses e aguas territoriales y limítrofes con Venezuela

En artículo escrito y publicado en este mismo portal de Aporrea y titulado "La perversidad de Inglaterra contra Venezuela", sostuve y sostengo nuevamente, que, si en la historia había un país perverso contra Venezuela, ese país tenía un nombre y se llamaba Inglaterra.

Y esta afirmación la sustentaba con hechos. En esa oportunidad señalaba, por ejemplo, como sus corsarios y piratas, en busca de Oro y recursos para mantener sus posiciones en el Caribe, asolaron las regiones esquivas, tomaron posesión de asentamientos y quemaron dos veces a Ciudad Bolívar. No se conformaban con robar y saquear, traían desolación y muerte.

Uno de sus piratas. (Sr. Walter Raleigh) amante y hombre de confianza de la Reina Isabel I, enviaba informes a la Corona Inglesa y Oro saqueado, para convencerlos de la importancia geográfica de esas tierras, sugiriéndoles al mismo tiempo que se adueñaran por la fuerza dar esa región para consolidar el poder inglés en toda la zona.

Siguieron al pie de la letra las recomendaciones del Pirata, amante de Isabel, y luego de Poblar con colonos zonas esequivanas, territorio de la Capitanía General de Venezuela, dieron la estocada final contra nuestro país, en componenda con los Estadios Unidos, despojándonos, mediante un Laudo Arbitral, irrito, criticado en su oportunidad sus propios periódicos, arrebatándole a Venezuela, ya independizada, 159.mil Km. Cuadrados todo lo que se conoce actualmente como territorio Esequibo.

Importante destacar, a propósito, que el primer reclamo histórico de Venezuela, contra las andanzas de la Pérfida Albión, en el Esequibo tierra venezolana, lo hizo el propio Simón Bolívar, nuestro Libertador, quien instruyó a sus diplomáticos, para que reclamara esta actitud osada de Inglaterra, y conminara a sus colonos a retirarse de territorio venezolano.

No conforme con esta conducta, Inglaterra propuso a los Estados Unidos, documentado por el Dr. Pedro José Lara Peña, quien lo reveló en discurso dictado ante la Academia de Ciencias Políticas de Venezuela, dividir a Venezuela de polo a polo, una parte le serviría a los Estados Unidos, para que metiera a los negros, que querían sacar de su territorio hay la otra parte sería colonizada por ellos. Esto no se concretó porque EEUU, ya había aprobado la Doctrina Monroe y consideraba este territorio como su patio trasero.

Esa postura perversa y de predadora mantenida por Inglaterra contra Venezuela, se ha mantenido en el transcurrir de los siglos y observamos hoy, como no sólo han hecho comparsa con los Estados Unidos para aplicar sanciones y bloquear a nuestro país, utilizando la figura de un delincuente que se auto proclamó presidente, sino, que aprovecharon la oportunidad y el caos que generaron para robarse las reservas de Oro, que le pertenecen al pueblo venezolano. Hoy cuando la tendencia es inversa y se reconoce la constitucionalidad y legalidad del gobierno venezolano, se resisten a devolver el Oro robado.

Veíamos sosteniendo igualmente, que detrás de la presente controversia y la hostilidad del gobierno guyanés contra Venezuela, esta Inglaterra, fomentando la rivalidad entre bastidores, para sacar provecho a la división que pretenden crear, para pescar en rio revuelto.

Y no nos equivocamos, ya empiezan a desnudarse y anuncian el envío de naves de guerra para reforzar y continuar estimulando la conducta ilegal y hostil del gobierno guyanes contra las República de Venezuela.

Ese hecho constituye también una alerta para las autoridades venezolanas y todo nuestro pueblo que masivamente se manifestó por nuestro justo e histórico reclamo. El gobierno de Guyana trabaja con ambas manos, como siempre lo ha hecho, por un lado, aparenta conversar, dialogar y con la otra continúa realizando acciones posesorias y solicitando ayuda que le refuercen en su ilegal postura frente a Venezuela. No hay que dormirse en los Laureles.