Hay vida después de la ansiedad

"Vivir con ansiedad/depresión es difícil. A veces el dolor o sufrimiento es de larga duración, como puede durar semanas o meses, todo el día y en la noche o en medio de la noche comienza de nuevo. Las palpitaciones son fuertes como si una persona estuviera muriendo. Para estar segura he acudido a la Sala de Emergencia (Hospital). El efecto en mi cuerpo es debilitante. Lloré, tomé duchas frías, bebí agua fría, salí al clima frío para tratar de deshacerme de esta presión en mi corazón, pero nada funciona". Así se expresa "María" (no es su nombre real) 63 años, quien padece de ansiedad hace más de 30 años. A pesar su condición ha criado sola sus dos hijos, se graduó de la universidad, trabajó en agencias del gobierno, está jubilada, le gusta la lectura, es independiente, disfruta de la naturaleza, caminar y con el tiempo ha aprendido a manejarla.

En la salud mental la ansiedad severa es el segundo mayor de incidencia en el mundo después de la depresión. Aunque frecuentemente se cruzan la depresión y la ansiedad. La ansiedad es una reacción natural de miedo a un estímulo externo amenazante que cuando se convierte en ansiedad severa puede afectar nuestro diário vivir. Es la interpretación exagerada a un estímulo como "horrible" "catastrófico", es um miedo irracional. Acompañada de miedo intenso al futuro, a que no todo salga bien, miedo a un ataque cardíaco, a morir aficciado, a ser abandonada, a la muerte.

La mayoría de los profesionales del comportamiento humano parecen estar de acuerdo que no tiene cura, pero se puede aprender a gobernar los pensamientos, educar los procesos cognitivos. Hay una toda sombrilla de técnicas de ayudas para manejar o prevenir, como estratégias de relajamiento, la meditación, exposición gradual, ejercicios físicos, escuchar música relajante, llevar un diario, aprender a gestionar las emociones, educarse más sobre la ansiedad, buscar grupos de apoyo digitales o presenciales, identificar los servicios de emergencia de salud mental local, espiritualidad, caminar, pasar más tiempo en medio de la naturaleza, visualización de imágenes, teoría de inteligência multifocal, logoterapia, entre muchas otras. Si comienza a escalar la ansiedad es recomentable buscar ayuda psicológica y en nuestra opinión el último recurso debe ser la medicación, (Davies, 2022). No toda estratégia, psicoterapia, tratamiento psicológico o medicamento funciona eficazmente de igual manera para todo el mundo. Aún así hay vida después de la ansiedad.

Muestra de ello es Scott Stossel, desde muy niño ha sufrido ansiedad aguda manifestada en fobias como miedo exagerado a espacios cerrados, miedo a volar, a los gérmenes, fobia social, miedo al desmayo, a hablar en público, a vomitar en avión, recurrentes pesadillas. Ha vivido severas tensiones musculares, graves pensamientos desesperantes y muy frecuentes ataques de pánico. Tomó una batería de psicoterapias por tres décadas: terapia racional emotiva, terapia de exposición en vivo, acupuntura, yoga, filosofia estoica, terapia expresiva de apoyo, masajes terapeuticos, oración, terapia de aceptación y un largo etc. Usó montones de fármacos prescritos y hasta drogas sociales como alcohol. Aún así, Stossel, logró ser editor en jefe de la prestigiosa revista Atlantic Monthly, escribe para The New Yorker y es comentarista para la BBC, está felizmente casado y escribió uno de los libros más completo sobre el tema que incluye su propia vivencia con la ansiedad, ver referencias. Aprendió a manejar su ansiedad.

Para algunos famosos científicos, artistas, filósofos, escritores no fue o ha sido un impedimento haber padecido ansiedad: Franz Kafka, Jerome Kagan, Virginia Woolf, David Foster Wallace, Charles Darwin, Sigmun Freud y muchos otros. Dean Simonton, psicólogo de la Universidad de California que ha pasado décadas estudiando la psicología del genio estima que un tercio de los científicos y científicas más eminentes sufren o sufrieron de ansiedad. Stossel apunta: "Si padece de ansiedad, quizá puede sacar ánimos de las pruebas cada vez más abundantes que indican que la ansiedad y la inteligencia están enlazadas". Quizá la o el que sufre ansiedad no sea un genio, pero tampoco se puede menos preciar la inteligencia. Otro elemento positivo, la ansiedad puede ayudar como insentivo a un comportamento ético, experimentando culpa, vergenza evitando graves consecuencias. Estudios psicológicos de criminales muestran que en promedio tienen bajos niveles de ansiedad y coeficiente intelectual inferior a la media.

De acuerdo a Dainius Puras, profesor, psiquiatra y exrelator especial de la ONU para la salud física y mental, indica que los departamentos de salud mental generalmente se limitan diagnosticar el cerebro y medicar, sin embargo muy pocos consideran la pobreza, las desigualdades sociales, las violaciones de los derechos humanos y su impacto en la salud mental, no abordan las raíces sociales del sufrimiento. En otras palabras, padecer de ansiedad no tiene su origen solamente en su mente, obedece también a factores socio-económicos. Esto quiere decir, que no siempre es culpa suya padecer ansiedad.

Retornando al plano individual, pese a todo, se puede tener ansiedad y a la vez se puede potencial la creatividad y ser equilibrado, ser productiva, profesional, una estudiante sobresaliente y aprender a educar los pensamientos. Se puede cultivar la paciencia aún en medio de una sociedad competitiva, bombardeada de estímulos como redes sociales, Internet, medios de comunicación, demandas laborales, juegos, exceso de ruídos y una sociedad acelerada. Gradualmente se pueden dar pasos para el autocontrol. Se puede crecer e medio del dolor y podemos, si queremos, poner el futuro en las manos de Dios: "Nunca te dejaré ni te abandonaré" Hebreos 13,5. Se podrá argumentar, que es fácil decirlo, respondemos, cierto, pero no es imposible aliviar la ansiedad.

En resumen, hay millones de personas que han aprendido a gobernar sus pensamientos, han desarrollado habilidades para sobrellevarla sin medicamentos, han identificado estratégias y tratamientos para en frentar la ansiedad. El capitalismo neoliberal agudiza los trastornos emocionales y ha hecho de la salud un negocio, no es un problema meramente individual. Hay y han habido famosas figuras, científicos, escritores que pese a su condición han hecho significativas contribuciones a la humanidad y otros no tan famosos han realizado sus sueños o metas como "María". No se acaba su mundo porque se padezca ansiedad. Por todo esto y mucho más decimos que hay vida después de la ansiedad.

Referencias

Casado, R. (2023). El mapa de la ansiedad; una guía para entenderla y aprender a gestionarla. Editorial Random House: España.

Cury, A. (2023). Ansiedade; como enfrentar o mal do século. Editorial Benvirá: Brasil.

Davies, J. (2022). Sedados; cómo el capitalismo moderno creó la crisis de salud mental. Editorial Capitán Swing: España.

Delgado, S. J. (fecha no disponible). Cómo curar la ansiedad sin medicamentos: 12 estratégias eficaces. Portal: Rinco de la Psicología.

Gupta, A. (Agosto, 2020). Nenhuma saúde mental sem dereitos humanos: uma análise do recente relatório do Relator do ONU. Portal Mad in Brasil. Brasil.

Ibáñez, M. & Jiménez, J. (Octubre, 2014). La ansiedad es miedo. Portal Russian Today: Rusia.

Stossel, S. (2014). Ansiedad; miedo, esperanza y la búsqueda de la paz interior. Editorial Booket: España.

Torres, C. R. (Septiembre, 2023). Entrevista por email a "María". Brasil.

White, A. M. & Newman, T. (Agosto, 2021). Ansiedad: causas y técnicas para hacerle frente. Portal: Medical News Today.

Xavier, M. J. (Septiembre, 2022). Ansiedad encarnada: el monstro invisible de la modernidad capitalista. Portal Crisis.

Zandona, A. (2022). A libertação da mente ansiosa. Editorial Cancao Nova: Brasil.

 

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