Hay personas que se toman la política como un oficio más, desde donde creen más en el convencimiento, la explicación, el diálogo, la palabra y no tanto en la coacción, la violencia, la coercibilidad, que es hacia dónde se orientan los regímenes de fuerza, ejercida sobre todo por los que en realidad toman las decisiones, sobre todo cuando en su mayoría son miembros de los que tienen por atribuciones estatales el uso y mantenimiento de las armas, es decir, de las fuerzas armadas nacionales, que bajo las excusas del ataque a la seguridad de la nación por parte de otras naciones, se hacen de la vista gorda de lo que son sus atribuciones constitucionales, convirtiéndose en los decisores de las políticas, lo que dista mucho de ser la mejor pedagogía en cuanto al trabajo que se debe hacer con la gente desde los sectores civiles, que están sujetos al arbitrio de aquellos. En Venezuela, con un sistema presidencialista, ocupado por un civil, controlado por los hombres de armas, como en los tiempos de los gendarmes necesarios del positivismo decimonónico, y no exageramos en decirlo de esta manera y sin que ahondemos demasiado en consideraciones teóricas, ya que es la práctica es lo que hay. Contemos las responsabilidades que han asumido los hombres y mujeres de las FANB, y veamos si se corresponde con una minoría o una mayoría en las instituciones del Estado, y con un alto control sobre las responsabilidades que deberían estar en manos de profesionales de otras ramas afines a los roles que deben cubrir en la administración pública.

En una sociedad como la venezolana, donde la división de clases sociales es profunda, entre los sectores privilegiados de la sociedad, donde los oligarcas siguen ocupándose de sus negocios e intereses, y de igual forma la nueva burguesía y que revolucionaria, y particularmente de una representación de los chavistas que luego de alzarse el 4F, y con la inesperada desaparición del líder del proceso de cambios con la suigéneris revolución pacífica, que se inicia con los cambios a nivel político de unos venezolanos y venezolanas por otros, de la IV República, a la V República, la Bolivariana de Venezuela, con fundadas y sustanciales raíces, que tienen que ver con la simbiosis entre las tres culturas, y un pueblo que es sabio y de grandes convicciones a la hora de tomar decisiones, aunque también se equivoca, cuando deja de seguir sus propios instintos, y se deja llevar por los sentimientos y las pasiones, sin atender a las propuestas y lineamientos que sólo lo pedagógico es capaz de lograr cuando se explica inequívocamente y con claridad cristalina, explicando en todo momento, siempre que las circunstancias lo permitan, las acciones a tomar, en beneficio de las mayorías, por mandato soberano, y sin los subterfugios a los que nos tienen acostumbrados entre coyunturas y pragmatismos.

Es responsabilidad del ejecutivo hacer que la educación formal e informal llegue a cada rincón del territorio nacional, mucho del cual ha sido descuidado en su plenitud, y donde hay mucha población que vive casi aislada y sin la atención debida y que corresponde a un gobierno que se precie de ser el representante de todos los venezolanos y las venezolanas, hasta los más distantes de toda la geografía nacional. Es la principal prioridad , y lo que le corresponde al Estado, porque se trata de la patria, de su gente, del pueblo, de todas y cada una de las personas que históricamente nos dimos desde la consumación de la independencia que se logró hace siglos, pero que hoy está en ascuas, porque la soberanía ha sido puesta a prueba con el desarrollo de los últimos acontecimientos respecto a la situación litigiosa entre Venezuela y los británicos por una parte, y con la disputa con Guyana por los territorios que aquellos se tomaron abusivamente, y pese a los laudos nada se ha concretado sobre la marcha. Y que el gobierno madurista ha sacado de la manga para iniciarse en la contienda electoral que corresponde a finales de este año, y que sabe que puede perder el chivo y el mecate, por el desgaste y las marramuncias que lleva acumulada en el ala, ni hablar de los hechos de corrupción, y la vagabundería de unos cuantas fichas que hoy son prófugos de la justicia o están detenidas en las ergástulas del régimen, con las garantías que otros detenidos no tienen, y que están presos por reclamarle al régimen que cumpla con las leyes, principalmente con la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, nacida en revolución de manos de su líder Hugo Chávez y los compatriotas de ese momento, que hoy son perseguidos por el madurismo y sus partidos políticos atados a decisiones espurias desde el PSUV, que hasta ahora ha actuado como un bastión de una parcialidad política demagoga.

Dónde están los profesionales titulados en las diferentes carreras que se requieren para ocupar los altos cargos en las instituciones del Estado, con capacidad para saber a ciencia cierta qué hacer para salir de este atolladero en que nos tienen sumergidos debido a las malas decisiones tomadas, que no han favorecido al pueblo sino a los grupos conformados alrededor del poder constituido, que han cooptado al poder constituyente, y se están pagando y dándose el vuelto, con los recursos del Estado y los negocios públicos. Son reos de alta traición al juramento que han hecho ante Dios, la bandera y las instituciones, y traicionado a los ideales de tanta gente que ha dado su vida por adecentar al país de tanto saltimbanquis, que en atención a sus intereses particulares y de camarillas enquistadas en las instituciones estatales, estadales y aguas abajo, donde las mayorías tienen que defenderse de las minorías que usufructúan desde cargos de alta y de poca monta, a costa del sacrificio, la seguridad, la libertad y la felicidad de todas y todos, como máximos objetivos y fin, que se busca alcanzar para todo el pueblo, siendo el soberano al que le violentan sus derechos a diario. Si no se recibe una verdadera y veraz información, si no se alcanza la formación con conocimiento de causa, y las consecuencias que aparejan por sus diversas manifestaciones, la adversidad será lo que se obtenga. Es más educación lo que se requiere, de pedagogos con formación y disciplinados, ellos harán posible el cambio de paradigma para el avance de nuestra sociedad, sabiendo cómo se bate el cobre sobre la marcha hacia nuevas utopías que posibiliten más temprano que tarde lo que es hacer patria.

A diario nos mantienen bajo un perenne pregonar de políticos de poca monta, que sin moral y menos ética, se dedican a mentir sin rubor, con descaro, sin atender a su responsabilidad pautadas por la constitución y las leyes, desde las esferas del poder se erigen como gobierno obrerista, cuando en la práctica es todo lo contrario, pues el beneficio es hacia los sectores acomodados, hacia los empresarios privados, con quienes hacen grandes negocios que dejan buenos dividendos para quienes aprueban y firman desde el gobierno lo que contraviene las responsabilidades desde el Estado. Si quieres conocer a una persona dale poder y verás la transformación que se ejerce en él, si no tiene una profunda convicción de cuál es su rol en la sociedad y lo que debe hacer, no lo que le venga en gana, porque el cargo momentáneo que ejerce no es una patente de corso, que le sirve para hacer lo que le venga en ganas, y peor aún si está rodeado de aduladores y jalamecates , que es vez de atender a sus responsabilidades y ser honestos, engañan y manipulan a su vez, que lamentablemente es la política rampante que se aplica entre aprendices de brujo, que creen que sus intereses personales sean los de la República, craso error de apreciación, y así actúan, desde sus empresas de maletín, haciendo de la administración pública, sus negocio personales, de eso es que se trata, de cómo han convertido a la nación en un botín de guerra, manteniendo el río revuelto, para ganancia de pescadores de oportunidades sobrevenidas al uso y el abuso del poder.

Nuestra historia republicana, desde Páez hasta Maduro así ha actuado en las altas esferas del poder como cabeza del Estado, de un Estado con altas responsabilidades, pero que las evade y le saca el cuerpo, porque los intereses personales y de grupos en sectores bien definidos, hacen lo que hacen, porque así son, y mientras no se rindan las cuentas claras, como decía un entrañable amigo y profesor universitario prestado a la política, hablo de Samuel Moncada, quien sigue ocupando cargos de relevancia para el país. Para quienes hemos trabajado tantos años en la administración pública, y hemos salido en una pieza, pese al maltrato de los funcionarios y en general de los servidores públicos por parte de los propios compañeros de trabajo que ocupan cargos políticos y deben rendir debida cuenta a los que gobiernan, con poca noción de conjunto, en la tan delicada y compleja labor desde la educación. De aquel Ministerio de Educación Superior del ministro Navarro a este de la ministra actual, es mucho lo que se ha desacreditado, y como el resto de las instituciones del Estado están en mora con sus trabajadores y empleados públicos, a quienes no se les han cumplido sus derechos laborales por parte del gobierno, que sí ha conculcado abierta y reiteradamente las reivindicaciones, dejándolos en las más abyectas condiciones de vida.

Venezuela hoy se encuentra postrada y en terapia por las medidas aplicadas desde el Estado capitalista por parte del pragmatismo aplicado por los maduristas que han hecho lo que está en sus maquinaciones para mantenerse atornillados al poder y seguir disfrutando de las mieles del poder. Sus cúpulas partidistas y de un sindicalismo ramplón, mantienen al país bajo sus leyes, mientras ejercen una contención de arriba hacia abajo, por parte de una práctica autocrática postura que retiene con una mínima mayoría sub pagadas clientelarmente, mientras el grueso de la población bajo políticas funestas en lo económico y social. Las carencias que se han acumulado en una década, mientras los capitalistas nacionales e internacionales hacen sus lucrativos negocios desde el rentismo petrolero y el reparto de las divisas en un mercado especulativo e inflacionario contra toda lógica económica. Sin atender a tiempo a los consejos de asesores duchos en tales materias, llevan a rastras al país y su gente, porque no alcanzan a ver el compromiso que han desatendido con la República, es decir la cosa de todos y sus necesidades imperativas. Los humildes de la tierra en un mundo en decadencia, tiene pocas posibilidades de salir librados, cuando los irresponsables gobiernan, y las mayorías sufren las calamidades por una representación que solo tiene ambiciones sectarias. La nación llamada República Bolivariana de Venezuela, está más dividida y segregada que nunca. Los resultados están a la vista de propios y extraños. No hay nada oculto bajo la luz que lo escruta todo ante la claridad que despeja toda sombra de dudas.

Lo que está a la vista no necesita anteojos para quienes llevamos el sol a las espaldas, y estamos viviendo la ñapa, como diría mi progenitor cuando cumplió medio cupón hace poco más del medio siglo pasado, cuando las posibilidades y expectativas de vida iban encaminadas a sumar años de vida, pero no vida a los años, fueron los tiempos de cambio de época, la final de la era que pasó. Ni calva ni con dos pelucas podemos decir que ha valido la pena el haber aprendido que es mejor ser que tener, y saber cómo se bate el cobre, y la verdad que yace oculta bajo la superficie, y que sólo y apenas vamos viendo, cuando hemos podido remover las pesadas capas que nos ocultan la realidad y la miseria humana de gente que ha trastocado su personalidad, en la que aflora su psicopatía y sus impulsos lascivos, carente de empatía con el resto de la humanidad. El poder los enceguece y los insensibiliza, porque igual se corrompen y cometen las más de las veces, delitos y hasta crímenes de lesa humanidad, al dar la orden de disparar primero, pese a haberse rendido el enemigo, mancillando el código de conducta de cualquier hombre de armas, militar o policía en servicio del Estado. Cuál es la calidad del servicio y la cualidad personal de los servidores públicos cómplices del inmenso desfalco contra la nación, sin duda asistimos como especie humana a tiempo de profunda reflexión y es momento de poner las barbas en remojo, no vaya a ser que perezcamos por no haber tomado las decisiones correctas, y el remedio sea peor que la propia enfermedad que venimos padeciendo. Lo que viene es joropo tramao, y los que han usufructuado el poder y acumulado bienes y capitales ajenos, ya no van a poder escurrir el bulto, se les acaba el tiempo, porque hay un hueco fiscal imposible de cubrir con más subterfugios y eufemismos discursivos, puros pote de humo que la borrasca de la realidad logre ocultar, ni que se pretenda tapar el sol con un dedo. De nada les va a servir que se aproveche de los escapularios ajenos, ni los maduristas gobierneros ni los maricorinistas aspirantes, son todos y todas, caimanes del mismo pozo de estiércol por la postura que han dejado para la nación entera. Es tiempo de llamar las cosas por su nombre, al pan, pan, y al vino, vino.

Se ha cumplido el Plan de la Patria chavista, o en su lugar se ha querido imponer uno madurista por parte de los saltimbanquis recién llegados conspirando con lo peor de la IV República, con quienes se asociaron para seguir delinquiendo contra la patria que resurgió de sus cenizas desde el liderazgo de Chávez y la participación y protagonismo del soberano. Qué pasó con el Golpe de timón, que en vez de seguir por nuevos derroteros, prefirió deshacerse del socialismo y atacar al comunismo desde las altas esferas del régimen dictatorial, separando de nuevo al país en las pequeñas republiquetas para los militares y los civiles atornillados al poder sin el pueblo. Y así se duplicaron las 3R3, porque ladrón que roba a ladrón, tiene cien años de perdón en la tierra arrasada por los Alí Baba. El año que culmina cerró una década en la que el presidente obrero NiMaMo por su jocoso acrónimo deja a la República Bolivariana de Venezuela que heredara de Chávez, a través del caudal de votos que logró de sus seguidores que en mala hora asisten al mayor engaño de la historia nacional. Los chavistas y maduristas están enfrentados y frente a los adversarios que tienen el poder económico, y forman en buena medida a quienes insisten en volver a los tiempos pasados que culminaron a finales del Siglo XX.

El comunismo internacional es una vitrina en la que ya pocos se solazan por ver qué ofrece en estos atribulados tiempos, en los cuales es materia de intelectuales, de filósofos e historiadores o sociólogos, situados desde la academia o los círculos de estudio, para su formación personal y comunitaria en algunas escuelas rurales o de las principales universidades en el mundo. Pero aparte de darnos las claves del desarrollo y el mal llamado progreso de la humanidad, lo que hemos es retrocedido a tiempos remotos, donde los pocos que son ricos y dominantes por controladores del mundo desde sus grandes corporaciones, principalmente desde Wall Street, la mayor y más perversa institución donde se juega con la vida y con la muerte de las personas en todo el mundo liderado por los que representan los verdaderos intereses difusos en el planeta, que controlan las economías y las finanzas, y sostienen el entero entramado de los gobiernos a nivel global que dependen del dólar para su funcionamiento. Es pues la base de sustentación de los que hacen que el imperialismo siga funcionando con las guerras de exterminio de quienes se les oponen y han evitado que les instalen sus agencias y sucursales de las reservas federales. Las cabezas de playa son las bases instaladas en casi la mitad de las naciones del orbe, pagadas con los recursos de los países ocupados o bajo las acciones de las principales potencias que hoy se disputan la hegemonía a nivel del planeta. Si seguimos ignorando las llamadas de alerta ante tales verdades, en poco tiempo estaremos a merced de estos pocos ricos adueñados de la tierra, el agua, el aire, la energía, los alimentos, las comunicaciones, y lo que viene a continuación desde la Inteligencia Artificial, que ocupan la mayoría de los espacios que hasta ayer nos pertenecieron a los seres humanos.

Qué nos toca hacer frente a tanta inequidad, tanta maldad, tanto oscurantismo que quiere seguir ejerciendo su poder y control psicópatas y sociópatas, sobre el resto de la humanidad entera, del exterminio de las tres cuartas partes de las especies vivas del planeta Tierra. Los no humanos ya tienen sus interlocutores con parte del resto de quienes permanecerán aquí después del 2050, es decir, ese uno por ciento que en teoría serían los que adueñados casi de la totalidad de lo que se necesita para vivir en condiciones normales de existencia, sigan con sus paradigmas, su acumulación y sus intereses de clases entre los mejores de este mundo de ilusiones, de infelicidad y miseria para los muchos que son los pobres en la tierra de gracia y de desgracias. Cuanto más creen que esperarán los que nada tienen, porque hay quienes lo tienen todo y quieren más, sin que les importe todos los sufrimientos y calamidades que están provocando, a fin de llevarnos al inframundo, obedeciendo a leyes inexorables, a pretendidos dioses que les han otorgado tierras de pura boca, y que luego y a través de falsos documentos, pretenden apoderarse de tierras que ha sido el hogar permanente de quienes allí han nacido, y han defendido de los supuestos herederos de pacotilla. Esas son las guerras que se sostienen como allá en el Medio Oriente, o las guerras por adueñarse de los hinterland, puntos clave para el intercambio y el comercio para los grandes consorcios, que ponen y quitan presidentes en las naciones que dominan el escenario internacional desde hace siglos, los últimos por cierto de Piscis, del oscurantismo que termina. Estamos en transición hacia lo que será la nueva narrativa del momento presente, en el cual se bosqueja y alinean los rumbos que guiarán a la humanidad que ha despertado hacia los nuevos umbrales.

Muchos serán arrastrados hacia el abismo de la historia tantas veces contada y pocas aceptadas, y que los guías de la humanidad nos han marcado entre Oriente y Occidente, entre quienes han mirado hacia adentro y los que buscan hacia afuera, los que buscan la conciencia, y quienes quieren mantenerse desde lo cognitivo para comprender lo que no tiene vuelta de hoja. O es socialismo, o la libertad se consumirá entre los buenos y los malos, el yo y el ego de la entera humanidad enfrascada en epistemes que solo muestran parte interesada de las escrituras de todos los textos que en todas las culturas nos han ido llevando a estas civilizaciones enfrentadas por lo dimes y diretes. Creo que la mística y la cuántica se han topado y es lo que será decisivo aprender y comprender, porque no hay más tiempo, el momento del aquí y ahora presente, de lo pasado y de lo futurizo, se desarrolla antes nuestros ojos, lo vemos, lo sentimos, nos lo han dicho, y se hace a cada momento como existencia, donde cada uno tendrá que seguir su propio sendero que por propia convicción determina será su camino de regreso a la fuente originaria de todo el entramado cuántico, del observador observando su obra realizada y por realizar mientras dura en lo que es su realidad, su trascendencia, su unidad con el todo y lo que es real.

En política nada es casual, en nuestra situación actual nos jugamos el porvenir del Estado, y es el estado de cosas de la nación, por parte de gobiernos maulas que toman las oportunidades en un momento dado, y ese turno que les corresponde lo tiran por la borda, siendo malagradecidos con sus padres y sus madres, a los que sacrifican si fuere el caso, para obtener lo que las circunstancias les ofrecen, sin que hayan dado ni un ápice de sus propias existencias, renegando de todo lo que se les ha dicho hacer entre el bien y el mal, entre la entrega y el retener lo logrado, es decir, le entregan el alma al diablo, con tal de alcanzar los ilusorios sueños que no son más que las pulsiones de la carne, de la materia, del encubrimiento de lo que está presente y ha sido permanente y consecuente, distinto a lo que es y se muestra como lo que aparenta ser, un estado de la materia, una forma elaborada desde la mente, una manifestación de la luz rebotando en la energía, una manifestación de lo etéreo que dispone que todo esté en equilibrio y llegue a haber armonía entre cada uno y todos los elementos que participan en esa danza donde no se ve al bailarín sino los movimientos que nos sobrecogen.

Feliz año, próspero año nuevo, paz y amor para todos y todas en este espacio finito de lo infinito. Un abrazo.